No entiendo la forma de vestir que tienen algunas adolescentes. Vale que no me considero una fashion victim, ni mucho menos, digamos que soy más bien clásica vistiendo, sobre todo con la ropa de trabajo, pero de ahí, a la ropa que veo por la calle últimamente creo que hay un abismo.
Se que se llevan mucho este año las sandalias abotinadas. Me refiero a esas que son sandalias con los dedos o parte del pie al aire, pero que luego, en la parte del tobillo se convierten en botín. Veo por la calle últimamente a casi todas las veinteañeras con este tipo de calzado. Y yo me pregunto, ¿hay algo más inútil? Vamos a ver, si te pones sandalias con los dedos al aire, será porque hace calor, y necesitas que te de el aire en los pies, pues si no, irremediablemente acabarían cocidos, ¿no? entonces, ¿qué sentido tiene que te pongas unas sandalias por la parte de los dedos, si luego metes el resto del pie en un zapato cerrado de invierno? En fin, para gustos, los colores. No me gustan especialmente, pero bueno, son cosas de la moda y a algunas les gustará y a otras no. Entra dentro de lo normal.
Paseo el fin de semana por la calle, y me cruzo con unas niñas de unos 18 años, las cuales llevan unas sandalias planas de estas tipo romanas (o de gladiador) que están super de moda los últimos años. Reconozco que estas me gustan más que las anteriores, porque las otras nunca me las pondría por lo absurdo de su sentido (al menos, para mis preferencias). Sin embargo lo que me llama la atención es que iban las tres amigas exactamente iguales, con un vaquero en tono azul clarito, de pitillo, y las sandalias romanas mencionadas, POR ENCIMA del pantalón. No estoy muy puesta en últimas tendencias de moda, pero intuyo que deben llevarse mucho. Paso por una tienda por la tarde, y veo otra dependienta exactamente con el mismo atuendo. Definitivamente, está de moda llevar los pitillo por dentro de las sandalias, supongo que para poder lucir las sandalias, porque de otro modo, no se lucirían nada.
Hasta aquí bien. Hay cosas que me gustan más que otras, pero no dejan de ser modas que se llevan un tiempo, y luego caerán en el olvido. Tal como ha ocurrido siempre. ¿O quién no recuerda la moda ochentera? Parece que ahora vuelven las hombreras, ¡Ay, madre! Noooooooo, por Diooooosss, me recuerdan a la era Locomía. En fin, lo dicho, para gustos, los colores.
Lo que ya no concibo es ver a algunas niñas de 15 vestidas para matar. Salgo por la noche este fin de semana, y veo diferentes tribus, cada una vestida de una forma, según gustos de cada uno (hasta aquí, lo normal). Sin embargo, me llama la atención unas chicas, que van vestidas con unos vestidos suuuuperceñidos, de tejido elástico. Una de ellas, va vestida con un vestido con escote palabra de honor en ese tejido que comento, si bien, pensé que era un vestido de tirantes. Se da la vuelta, y veo como lleva toda la espalda al aire, pero lo que yo pensaba que eran unos tirantes, en realidad me percato que se trata de los tirantes del sujetador, en un color que no tenia nada que ver con el resto del vestido, y cuya parte trasera con sus correspondientes enganches se ve claramente, por un enorme agujero que lleva en la espalda el vestido. Como si fuera un gran círculo que deja la espalda al aire, y en el centro de ese círculo, una franja horizontal que está formada por el enganche del sujetador. Me deja un poco perpleja.
Me fijo a continuación en su amiga, lleva otro vestido de tirantes de esos que van cogidos al cuello. La espalda del vestido deja ver igualmente, parte de la espalda al aire, si bien lleva puesto un sujetador convencional en la forma y diseño, vamos de los de tirantes normales, y por supuesto va enseñado todo el sujetador (lo cual se podría haber evitado simplemente poniéndose el vestido con un sujetador sin tirantes). Visto lo visto, deduzco que se debe llevar también esto de empeñarse en enseñar el sujetador, y no puedo evitar que me horripile.
Me digo a mi misma que si tengo una hija, nunca le dejaría salir así de casa, pero luego pienso que probablemente, los padres ni se habrán enterado de las pintas con las que salen sus hijas.
En definitiva, que yo se que no soy una fashion victim, pero de ahí a ir enseñando la ropa interior a posta, creo que hay un mundo ¿no? (lo de enseñar el tanga, da para otro capítulo aparte).